Paso hace unos 15 años, casi 16…
Después de pasar toda mi vida siendo la princesa de la casa, el centro de mesa, el adorno principal, como diría mi madre el primer chicharrón en todo, mi hermana tiene un bebe…
Cosa que para cualquier niño es motivo de sentimientos encontrados, se presume por defecto que para una mujer de 20 años, la llegada de un bebe a casa seria una alegría inmensa, y el primer varón en la familia pues más aun….
Pues supusieron mal!
Para mí fue una tortura.
Todo el mundo coincide en algo “un hijo le cambia la vida a uno”, aja… a los padres de la criatura cosa, que es más que obvia, pero a diario nacen muchos muchachitos en todo el planeta y para mí la única novedad era que iba a ser varón, total ya era tía desde los 10 años a larga distancia.
Este muchachito estaba aquí, en mi casa… el niño era muy simpático, dulce y hasta bonito el condenado! A todas estas, la emoción de ser tía en vida real no se parece en nada a ser la tía de las telenovelas cuya misión es buscar a los sobrinos, bañaditos y aporongaditos y llevarlos a comer a Mc. Donald’s y esperar horas en un PlayPlace, o pasearlos por un parque… en la vida real las tías que aun compartimos casa con los sobrinos, pues nos toca, o mejor dejo de pluralizar para victimizarme de una vez! Me tocaba ayudar a mi hermana, o sea cargar el niño, pasarlo de la cama de ella a su cuna, bañar supervisada (explicación a continuación) cambiar los pañales a turnos con mama y mi hermana, hacer los teteros cada 5 min, bueno, 3 horas creo pero eso pasaba todo tan rápido que me parecía que era cada 5 minutos, cabe destacar que esa leche maternizada, bueno la que estaba de moda en aquella época (Eny creo que era) era tan rica que hacía más de lo que se iba a tomar para que quedara merengada para mí y hasta en polvo me la comía jejeje!
El chamito nació justo en vacaciones universitarias, cercanas a semana santa, o sea que ni modo, estaba yo en casa y claro la emoción era inmensa, junto con la preocupación que si le apreté el pañal, que si no se iba a ahogar cuando lo acosté en la cuna… en fin, pasaron rápido los días de vacaciones y toco regresar a la rutina, ahora con el titulo reestrenado de TÍA… ahora era la Tía Romina… (y no la ant Romina, como me decía por cariño mi sobrina mayor, si ant = hormiga!!! No Aunt = Tía)
Mi vida según mi perspectiva no había cambiado para nada, yo seguía mi rutina normal, ir a clases, luego café donde Bárbara o Liomara, chismosear con María Virginia, Janosky, Mónica o Silvana, quejarme de mi novio y regresar a mi casa, a estudiar, pero… no contaba con que en mi casa… ya no me esperaba el almuerzo listo a mediodía… ni mi ropa en su lugar, ni preguntaban: que quieres comer?... porque mi mama y mi hermana estaban ocupadas con José Alejandro… y para rematar yo escogí el nombre!
Mi familia política adopto a la preciada criatura como su sobrino/nieto, por supuesto, mi novio se convirtió en su padrino y yo en la madrina….
Las visitas a mi casa ya poco venían por alguien más que no fuera por “el niño”, las salidas eran con “el niño”, los viajes de fin de semana o paseos, o comidas fuera todo, todo, toooooooodo era con “el niño”, es que hasta quien ese entonces era mi novio (y con este si dure más de 3 meses, total fueron 6 años y 11 meses de novios y 2 años y 11 meses casados) venia a casa y ya no era a apurruñarnos a ver películas o TV no! Era a jugar con “el niño”…
“El niño” se convirtió en la cereza del pastel. A tal punto que paso algo muy, muy extraño… los celos me mataban (y esto lo supe años después porque mi terapeuta lo averiguo durante una sesión de hipnosis).
Si señoras y señores una tarajalla de 20 años tenía celos de un bebe, bueno es que no era cualquier niño, era el único niño que desde su nacimiento compartió casa conmigo… me derroco, me quito mi espacio, mi trono y para rematar Varón!
En esa época comencé a almorzar en el comedor de la Unexpo, porque quizás en casa no había nada preparado, me tocaba comer en esas bandejas metálicas y los tenedores retorcidos, que quien haya comido allí sabia que solo se hacía por necesidad, más que por gusto!; pasaba más tiempo fuera de casa, me empecé a preocupar por los arreglos mecánicos del carro y de cosas que por lo general se ocupaban los demás (mi abuelito o mi mama)!Trataba de mantenerme alejada lo más posible de ese muchachito que con el tiempo se fue poniendo cada vez más dulce y cariñoso! Pero ni se me ocurría pensar en celos (¿?)
Hasta que una vez en unas vacaciones inter semestrales no quedo de otra
que enfrentarlo… me toco un día al azar bañar al nene… y bueno esta vez ya estaba el mas grandecito y se suponía que Yo ya tenía suficiente seguridad como para bañarlo sola sin supervisión… y así fue… el carajito muy entusiasmado, en su bañera principesca que estaba en un tope a una altura digamos que de 1 metro del suelo, lanzo un juguete al suelo … mientras me doblo a recoger el perol, el carajito se ha levantado de la bañera y se resbaló, se me ha caído el condenado niño y patinaba como una salchicha en el suelo jabonoso! Me quería morir, lo cargue, lo sacudí a ver si estaba vivo y cuando soltó el grito casi me da un infarto de la felicidad! Solo se lastimo un bracito pero no paso de allí, por supuesto el escándalo fue suficiente como para que los habitantes de la casa bajaran al baño a ver qué pasaba y les dije naaaaaada vale todo tranquilo, le cayo jabón en los ojos, pero ‘ta listo, vamos que lo voy a vestir….. desde ese día en que mi sobrino ahijado se me cayó hasta hoy en día, hay un lazo que va mas allá de la tía-madrina de la iglesia… el pánico que sufrí con solo pensar en que se hubiese lastimado no tiene explicación, hasta ese día llegaron los celos, recuerdo haber pasado ese día y muchos más pendiente que si le salía algún morado o si dormía y respiraba bien, pero el sacudón que Dios me dio en ese momento fue el que necesitaba para saber la tremenda responsabilidad que implica un niño, sea propio o ajeno bajo mi cuidado…
Al comenzar a hablar, antes de leer ya manejaba los números mejor que
nadie que yo conozca, no sabia escribir pero le poníamos cifras de millones y las leía, tenía una extraña obsesión con el Titanic (coincide que nació el 14 de abril día en que se hundió el Titanic), los lego y las colecciones de lo que fuera…
Pasaron los años, me adapte después a ser tía, lo he disfrutado mucho, haber tenido hace poco a los 5 sobrinos juntos y que todos quisieran andar conmigo en vez de con sus padres me encanto! Fue un contragolpe a mis hermanas! Sus hijos preferían a TÍA, que es chévere que habla los mismos idiomas que ellos (si unos spanglish, otros solo inglés o español)...
Cuando lo he necesitado, ese mismo carajito que se me cayó de la bañera, más de una vez me ha rescatado de mis episodios de narcolepsia post traumática, así como su hermanita que es mi asistente de producción en casa (inner joke). El es mi psiquiatra personal al más puro estilo de Charlie Brown. Son mis tesoros pero no puedo dejar por fuera a los otros 3 a quienes también adoro.
Gracias a ellos soy mejor persona, he aprendido a ser más modesta, a que no lo sé todo, a que los chamos van un paso más allá que los que ayer fuimos chamos y ahora de adultos no queremos admitirlo, he aprendido a no tolerar a los niños de los demás, por más de 2 horas.
Gracias a mis hermanas por regalarme esos 5 tesoros, aunque a veces provoca ponerlos en oferta o regalarlos.
Por eso cuando me preguntan ¿cuándo vas a tener un hijo? Siempre digo… tengo 5 sobrinos, con esos me basta y sobra!
En otra entrega les cuento como fue que aprendí a ser la tía chévere gracias a mi sobrina mayor Paula!
Elucubraciones de una Mente Acalorada... o lo que es lo mismo, una adolescente tardía o una anciana prematura! que insiste inexorablemente hacer reingeniería en su vida, recordando lo bueno para disfrazar lo malo! Tantas veces que me han dicho que mi vida parece una telenovela, que al fin me decidi a escribir... veamos que pasa, quien aparece, quien no aparece, recuerdos, experiencias normales y paranormales (para no decir anormales)...
1 comentario:
Claro mijito! claro que te adoro, pero reconocelo! soy la mejor tia del mundo! bueno, tienes 2 asi que mejor no respondas porque se pone celosa la otra jajajaja!
te quiero mucho carajito!
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